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La ilusión del rendimiento infinito ¿será que vivir lento es el nuevo privilegio?

Updated: Feb 17

Vivimos en una era donde la productividad se ha convertido en un mandato. Olvidando de manera casi inmediata, la necesidad de pausa y de reconexión constante con el propósito  que nos habita. Si no estamos ocupadas, sentimos culpa.


El filósofo Byung-Chul Han advierte en su obra “La sociedad del cansancio” que ya no necesitamos un jefe que nos explote: lo hacemos nosotras mismas, autoexigiéndonos sin descanso pero, ¿qué costo tiene esta inercia? ¿Cuándo dejamos de ser personas para convertirnos en máquinas del rendimiento?


Cuidarte no es un Lujo, es una Prioridad

Nos han enseñado que detenernos es sinónimo de pereza o ineficiencia, cuando en realidad, la pausa es el espacio donde nos reencontramos con nosotras mismas. ¿Cuándo fue la última vez que te preguntaste sinceramente cómo te sientes? ¿Qué necesitas para estar mejor? Aprender a hacer estas pausas es una forma de autocuidado y un acto de valentía en un mundo que glorifica el agotamiento.


Justamente estar inmersos continuamente en contextos tan competitivos y exigentes, nos genera una pesada carga de autoexigencia y presión con la que debemos  lidiar día tras día. Se espera que triunfemos y obtengamos éxito, pero nadie nos avisa de la dificultad  de esto y la probabilidad siempre presente del fracaso. Es nuestra propia labor aprender sobre la importancia  de celebrar los pequeños logros y disfrutar del proceso, aunque no se llegue al triunfo deseado. Solo con esto, ayudaremos a mantener un equilibrio emocional y a cuidar nuestra salud mental, la verdadera clave de una vida plena y satisfactoria.


Cuidarte no es un lujo mereces estar bien. Si cuidas tu cuerpo y tu mente, podrás atender mejor todo lo demás. Pregúntate ¿cómo te sientes?, ¿que necesitas para estar mejor, cómo te demuestras amor…? Dedica un momento en tu día a conectar contigo y desconectar de las redes, televisores y estímulos externos, de la necesidad de producir y producir para cumplir las expectativas que a través de imágenes en forma de post y likes te llegan a una velocidad vertiginosa todos los días, tener seguidores y subir los números puede esperar, tu salud mental no.


La Trampa del "Wellness" y el Verdadero Autocuidado

Si sentimos que nuestra mente está disgregada o en desorden, es porque  así estamos  viviendo. La cultura wellness de momento nos bombardea con la idea de que el bienestar se alcanza sumando más cosas: más hábitos, más rutinas, más técnicas hacks, para estar “bien” y si no lo hacemos de una determinada manera se nos dice que no estamos “sanando”.



La información que hoy en día nos está llegando, trae de suyo la idea de que debemos hacer, hacer y hacer para sentirnos de una manera determinada de manera masiva y casi autómata. El problema es que en ese mundo ideal siempre habrá algo que nos falta o algo que deberías estar haciendo para lograrlo.  Podemos tener un cúmulo de conocimiento, aprender todas las técnicas respiratorias, hacer todos los cambios de vida, constelación, hablar con los ángeles, ir a un montón de lugares, realizar todas las prácticas, trascender a todos los estados de conciencia a favor del bienestar y nunca será suficiente. Porque se supone que estamos haciendo algo que aprendimos o escuchamos allá “afuera” y para estar bien es necesario caminar hacia adentro.

 

Cuando se trata de salud mental y bienestar espiritual, menos es más. La verdadera transformación no está en hacer más, sino en hacer menos y hacerlo con intención. Volver a lo esencial: respirar, estar presente, soltar la sobrecarga de información y encontrar la calma dentro de ti.


A si que entre tanta información podemos elegir hacer una cosa y no diez pero con intención, dejar de seguir a un montón de gente, escuchar menos recomendaciones, disminuir los estímulos y escuchar menos opiniones, dejar de buscar allá afuera y regresar a lo simple a lo esencial, a la naturaleza, a la respiración, al momento presente a una tarea a la vez al aquí y al  ahora, a este justo instante como acto de libertad a favor del bienestar.


Así las cosas la pregunta sería: ¿Qué es el verdadero Autocuidado ?


Si partimos de la base que el amor propio es una decisión, podemos decir que el Autocuidado es asumir la responsabilidad de esa decisión. El autocuidado no es una tendencia ni un capricho, es la decisión de ponerte en el centro de tu vida, de priorizarte sin comparaciones, y con la amplia compresión que ninguna vida es igual a otra y que cada persona tiene sus propias estrategias de afrontamiento.  Al ser una decisión consciente el autocuidado se manifiesta en distintas dimensiones tales como:

  • Física: por ejemplo cuidar tu cuerpo con descanso, alimentación consciente y movimiento. 

  • Emocional: Escuchar y validar tus emociones.

  • Mental: Crear espacios de descanso para tu mente e introducir ocio creativo.

  • Social: Construir relaciones que nutran en lugar de drenar. Mejorar tus conversaciones y formas de comunicación asertiva. 

  • Espiritual: Conectar con lo que te da sentido.

  • Financiero: Relacionarte con el dinero desde la consciencia y no desde la escasez.

  • Profesional: Equilibrar la vida laboral sin sacrificar tu bienestar.



Tu realidad responde a tu energía, es urgente ser hoy el cambio que quieres ver en tu vida. La Elección Está en Ti


Seguir atrapada en la inercia del hacer o regalarte la pausa que mereces: esa es tu decisión. Pregúntate: ¿Qué necesito en este momento? ¿Cómo quiero vivir mis días?


Tener elección es un superpoder que te habita, elegir la pausa y la calma y no estar todo el tiempo enfocado en  cómo puedes hacer más cosas, ser más productivo, no te hace vago, ni perezoso. Te hace saludable.


Así que intenciona los días y elige conectar con lo valioso importante y significativo de la vida. Para empezar puedes preguntarte:  ¿esto es lo más saludable que yo podría estar haciendo con mi tiempo y mi energía en este momento?


¿Si mi vida se terminara hoy, me siento  satisfecha con las vivencias y experiencias que he tenido?


Si sientes que es momento de detenerte, de escucharte y de reencontrarte contigo misma, existe un espacio creado por Parceras para ello. En el Encuentro de Transformación Femenina "Caminando hacia el interior de tu alma", te invitamos a vivir una experiencia que te permitirá desacelerar, recuperar tu energía y recordar lo que realmente importa. No es un escape, es un regreso a ti. ¿Estás lista para darte ese regalo? 💜



Besos vuelan,


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